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Otro cruce entre OSSE y los jachalleros por la calidad del agua
Un grupo de vecinos de la localidad de Pampa Vieja, en Jáchal, salió a cortar la calle para reclamar que les aclaren dudas sobre la calidad del agua potable que consumen. Desde OSSE garantizaron que el agua es segura.
Por Daniela Jácamo
Este miércoles un grupo de vecinos de la localidad de Pampa Vieja, en Jáchal, salió a cortar la calle para reclamar que les aclaren si el agua potable que consumen cuenta con las condiciones sanitarias necesarias. Mientras la gente se manifiesta en esta localidad del norte de San Juan, desde OSSE aseguraron que el agua cumple con las condiciones sanitarias que establece la normativa vigente.
La polémica comenzó sobre fines de la semana pasada cuando se conoció un estudio del agua potable que provee la Unión Vecinal de Pampa Vieja. Este análisis establece que el agua que reciben los vecinos de la localidad cuenta con un 20.6 ppb y en el mismo estudio se aclara que el valor máximo de referencia para esta categoría debe ser de hasta 10 ppb.
De acuerdo a lo que informó Radio Norte de Jáchal, este resultado excede el índice aconsejable y generó alarma entre los vecinos que durante el fin de semana llegaron hasta las instalaciones de la vecinal para pedir explicaciones. De forma paralela, empleados de OSSE asistieron al lugar y tomaron muestras de la planta potabilizadora y del agua que beben en la escuela Almirante Ramón González Fernández.
Poco después el intendente Miguel Vega explicó que en el departamento rige la ordenanza de Agua Segura, que establece la realización de análisis para determinar la calidad del agua potable. Agregó que en uno de los controles encontraron el resultado de 20.6 ppb, pero aclaró que, de acuerdo a lo que le informaron los especialistas, estos valores no implican un riesgo para la comunidad.
Si bien los vecinos escucharon esta explicación, se quedaron con dudas y por eso resolvieron cortar el tránsito en la zona de calle Eugenio Flores y Patricio López. Un grupo de personas se instaló en el cruce de calles con carteles pidiendo explicaciones.
Ante este panorama, DIARIO HUARPE consultó a OSSE. Desde el organismo, el gerente de Operaciones, Sebastián Bringas, llevó tranquilidad a la población porque aseguró que el agua que bebe Pampa Vieja sí es apta para consumo humano.
El funcionario manifestó que el contenido de arsénico puede medirse en partes por mil millones (ppb, por sus siglas en inglés) y agregó que hace poco más de un año hubo una modificación en el Código Alimentario Argentino y quedó establecido el máximo permitido es de 10 ppb.
Igualmente, Bringas aclaró que este tope cambia en las zonas en las que históricamente se vienen encontrando niveles de arsénico debido a las condiciones naturales del lugar. El funcionario explicó que en aquellas regiones del país con suelos de alto contenido de arsénico, el límite de hasta 50 ppb está amparado por el Código Alimentario Argentino. "Esto implica que la medición hecha en Pampa Vieja está dentro de los límites establecidos bajo esta consideración", aseveró el especialista.
Bringas añadió que el agua está en condiciones de ser consumida y que, si bien este servicio no depende de OSSE, el organismo oficial seguirá haciendo los controles periódicos que garanticen que los vecinos consuman un agua segura.
Ante la pregunta de si es posible que OSSE directamente se haga cargo del agua en Pampa Vieja, Bringas afirmó que esto no está en estudio y agregó que antes de tomar una determinación así, se debería hacer un estudio integral de la situación de la vecinal y del servicio que presta.