Farándula
Cande Tinelli tildó de "enfermos mentales" a los autores del video del cerdo y la pileta
La joven replicó el video donde se mostró ofuscada por el hecho. Mientras tanto todavía no se identifican a los responsables del hecho.
POR REDACCIÓN
El video es tan claro en la calidad de su filmación como incomprensible el accionar que exhibe. Lo registró Federico Álvarez Castillo -como él mismo lo reconoció- en el jardín de su casa en José Ignacio, Punta del Este. Allí se observa cómo desde un helicóptero que sobrevuela a unos 30 metros de altura es lanzado un animal (se habla de un cerdo o un cordero), que termina cayendo sobre la pileta; de fondo, se escuchan risas.
El empresario textil sostuvo que comenzó a filmar porque “un helicóptero” sobrevolaba “el techo” de su vivienda. “(Pero) nunca imaginé lo que terminó pasando”, agregó. Luego, en un comunicado que volcó en Twitter y Facebook, aseguró ser víctima “de un hecho de vandalismo” por “una broma de muy mal gusto”. Y advirtió que realizó la denuncia en la comisaría local.
La filmación se conoció este lunes, viralizándose de inmediato. Y encontró el repudio generalizado de las redes sociales de una infinidad de usuarios anónimos, pero también muchos famosos, como Cande Tinelli. La it girl, quien siempre muestra un gran compromiso en la defensa de los derechos de los animales, subió en sus historias de Instagram el video de la caída del animal y escribió: “Enfermo mental”.
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Pero también otras celebridades se manifestaron en contra de este inexplicable hecho. Nancy Dupláa responsabilizó directamente a Álvarez Castillo “cuya diversión -según el criterio de la actriz- es ver caer un cerdo de un helicóptero a su piscina”. El humorista Nik, la escritora Mercedes Funes, las periodistas Valeria Schapira y Débora D’Amato, y hasta la abogada Graciana Peñafort dejaron mensajes en el mismo sentido.
Sobre las dudas sobre lo acontecido. El periodista uruguayo Marcelo Gallardo maneja una versión: un amigo del empresario le dijo: “Hagamos un asado y yo llevo la carne”. Y no encontró mejor manera que trasladar el cerdo en su helicóptero y -“cual bombardero de la Segunda Guerra Mundial”, según sus palabras- lo arrojó a la pileta, en una repudiable broma.
Sin embargo, el fiscal que interviene en la causa abierta por la denuncia de Álvarez Castillo no pudo dar con el dueño de la aeronave, ya que en esa zona existen muchos artefactos con esas mismas características.