En el Centro Cívico empezaron a tomarles la fiebre a empleados y público

El Gobierno provincial decidió reforzar los controles sanitarios en el Centro Cívico, el edificio que concentra a la mayor cantidad de empleados y organismos del Estado. Desde este lunes, a los trabajadores que están en actividad y al público en general les toman la temperatura para determinar si tienen síntomas que sean compatibles con el coronavirus. La medida se aplicará mientras dure la pandemia.

El gigante de la administración pública es el primer lugar donde la administración de Sergio Uñac decidió poner el acento con el termómetro, en el inicio de la fase III del aislamiento total y obligatorio dictado por la Nación y la provincia. Si bien hoy hay nada más que guardias mínimas, sigue asistiendo un importante flujo de gente y el Ministerio de Salud quiere aprovechar para controlarlo y detectar potenciales casos sospechoso de Covid-19.

Al ser el edificio de mayor afluencia de gente, los especialistas lo tildan como un posible foco de contagio donde hay que extremar las medidas de prevención. En el Cívico trabajan 5.000 agentes públicos y por día asiste la misma cantidad de gente y ahora, durante la cuarentena, hay unos 700 empleados en sus puestos y se calcula que a diario asisten unas 100 personas más.

El personal de Control Operativo y de seguridad que está apostado en el lugar fue provisto de modernos dispositivos que en segundos revelan si una persona tiene más de 37.5 grados que marca el protocolo sanitario del coronavirus. Basta con apuntar el aparato a la frente de la persona, para que marque la temperatura que tiene.

Claro que la fiebre por sí sola no es considerada un síntoma que sí o sí está relacionado al virus. Debe estar acompañado por tos seca, dolor de garganta o dificultades para respirar y recién ahí se activan las alarmas.

Los que tengan temperatura elevada serán derivados a un puesto que instaló Salud en la planta baja, para que un médico entreviste al paciente acerca de los otros síntomas y si estuvo en el exterior o en contacto con un infectado o casos sospechoso. Si se dan esas condiciones, inmediatamente se le da intervención al servicio del 107.

Como sucede desde el principio, con el ánimo de regular los ingresos, hay un solo lugar habilitado. Empleados y visitantes pueden entrar únicamente por avenida Libertador.