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Policiales > Formalización

Citaron ante el juez a siete policías por abuso de autoridad y lesiones contra una menor en el Skate Park

Contra los uniformados, entre los que hay dos jefes, pesa la acusación de haber agredido a una adolescente de 14 años que estaba patinando con sus amigos. También investigan si ocultaron pruebas. 

POR REDACCIÓN

01 de julio de 2021

La detención ilegal que se dio en el Skate Park el pasado 21 de junio podría terminar con hasta siete policías condenados por sus acciones. Ese es el número de uniformados que deberán responder ante la Justicia tras detener, esposar y llevar a al comisaría a una chica de 14 años que estaba patinando ese día con sus amigos en el predio capitalino. 

Según explicó el fiscal a cargo de la investigación, Adrián Riveros, hay distintos delitos imputados a los policías, algunos con responsabilidad mayor. El escándalo salpica a la Comsiaría 5ª y al Comando Radioeléctrico, ya que en el operativo participaron ambas divisiones, y hay dos jefes que estaban a cargo de las acciones ese día que también deberán presentarse ante el juez. 

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El fiscal explicó que la causa tiene pruebas de que la chica sufrió hematomas en el pecho y en la espalda, ya que fue reducida, arrojada al piso y luego un uniformado le apoyó una rodilla encima, tiene heridas por las esposas y todo eso fue comprobado por el médico legista. Además, en las declaraciones de la adolescente en la Cámara Gesell ella contó que sufrió maltrato durante todo el tiempo que estuvo retenida, que fueron más de 6 horas. 

Ese día domingo en la siesta los policías habían ido a dispersar a un grupo de adolescentes que estaba patinando en el lugar. Según entienden desde la fiscalía, debían separarlos en grupos de seis y pedirles que respetaran el distanciamiento, normas que se encuadran en la emergencia sanitaria. 

En un punto los uniformados primero habían rodeado a una amiga de la adolescente que terminó en la comisaría y ella intentó defenderla, diciéndole a los policías que no la podía detener porque era menor. Fue en ese momento que la inmovilizaron en el piso y la esposaron. Ninguna de estas dos acciones pueden hacerse con menores de edad, que están protegidos por la ley. 

Para peor, los protocolos indican que los niños y adolescentes deben ser entregados inmediatamente a sus padres, pero cuando la madre de la chica llegó al lugar, los policías no lo hicieron incluso cuando la adulta lo exigió. En cambio la trasladaron esposada a la comisaría frente a la plaza de Santa Lucía, donde estuvo desde las 14:30 hasta las 21 de ese domingo. 

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La niña estuvo esas seis horas sin recibir ninguna explicación encerrada en el lugar donde están los calabozos, aunque no fue encerrada en uno. Su madre y otros familiares desfilaron durante todo el día por la seccional sin que le entregaran a la menor o al menos una explicación. Según la denuncia, aseguró Riveros, los encargados de la comisaría también le dieron un trato hostil a los familiares. 

Cuando finalmente decidieron liberar a la menor ocurrió otro hecho de gravedad. Es que según denunciaron los policías redactaron un acta "in viso", donde declaraban que la menor se encontraba en perfecto estado de salud. Cuando intentaron que tanto madre como hija firmaran un documento la mujer se negó, ya que su hija ya tenía las marcas de las esposas y los hematomas en formación. Este documento, que es también prueba del mal accionar, nunca apareció y por eso también hay policías acusados de ocultación de un instrumento público. 

Este viernes sería la audiencia de formalización ante el juez donde definirían los plazos de la investigación. Según Riveros, no irían detenidos por los hechos ya que por ahora investigan delitos que son excarcelables y ninguno de los denunciados tiene antecedentes. 

Contra ellos pesan la declaración de madre e hija, las de testigos, el contenido de la Cámara Gesell, el video que uno de los amigos de la menor filmó y aportó y hasta la revisión del médico legista. A pesar de que en redes sociales los amigos de la menor denunciaron haber sufrido hechos similares no hay registros oficiales sobre otras actuaciones ilegales de la policía en el Skate Park. Tampoco hizo la denuncia el adolescente que filmó lo que pasaba al que un policía le intenta arrebatar el teléfono. 

Tolerancia cero, la orden oficial 

Ante este hecho hay dos investigaciones en curso que van paralelas. Es que antes de que interviniera la UFI de Delitos Especiales la Secretaría de Control de Gestión ya había separado de sus cargos a los policías señalados. 

Carlos Munisaga, Secretario de Seguridad, dijo que tras una investigación ya se le formularon cargos a los uniformados, se les quitó el arma y quedaron suspendidos de la fuerza. A los jefes que no se encontraban en la dependencia cuando ocurrieron los hechos se los trasladó a otros puntos y también quedaron bajo el radar investigativo. 

"No toleraremos la violencia institución y por eso inmediatamente se sanciona y se separa a los señalados", aseguró Munisaga y dijo que hay "tolerancia cero" con este tipo de actitudes. Las pruebas de abuso de autoridad también dejaron fuera la posibilidad de que intervenga el Defensor Policial, la figura recientemente creada que está previsto accione en defensa de integrantes de la Fuerza en casos en los que estén cumpliendo funciones. 

También, explicó el secretario, van a profundizar en la capacitación y formación de policías, tanto los que están en actividad como los que están en formación, para evitar que vuelva a suceder algo similar. 

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