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Provinciales > Tristeza

Murió en San Juan, Nelly Esther Brond, la primera enóloga del mundo

Nelly Esther Brond tenía 95 años. Se había recibido en la Escuela de Enología en el año 1952 convirtiéndose así en la primera enóloga del mundo.

POR REDACCIÓN

15 de marzo de 2024

Una triste noticia se conoció este viernes en San Juan referida a la muerte de Nelly Esther Brond, la sanjuanina que se convirtió en la primera enóloga del mundo tras recibirse en el año 1952 en la Escuela de Enología y Fruticultura. La mujer que marcó un hito en la vitivinicultura mundial tenía 95 años y falleció el jueves 14 de marzo, según dijeron desde su entorno.

Descendiente de Fray Justo Santa María de Oro, la destacada enóloga se crio en un hogar de padre tranviario y madre ama de casa. Fue la segunda de cuatro hermanos.

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Una vez egresada de la Enología, conoció el amor de su vida, Mohamed Tahar. Al año siguiente, en 1953, contrajo matrimonio y se fue a vivir un tiempo a la bodega El Globo. Pasó por Buenos Aires, Córdoba y Mendoza ya que su marido era interventor de control agropecuario en distintas provincias. Fruto de esa relación nacieron dos hijas, Liliam quien ahora es monja en el Convento del Espíritu Santo en Mendoza y Susana que al mismo tiempo le dio tres nietos.

En 1989, falleció su marido y de ahí en más su vida cambió. “Desde que mi marido murió yo quedé sola, para mí fue una etapa concluida. Siempre lo recuerdo, porque fue el compañero ideal que me ayudó a desarrollar mi pasión por los cultivos”, sostuvo en una entrevista que le concedió a DIARIO HUARPE en el año 2019.

Alrededor de las 17.30 horas los restos de Nelly Esther Brond pasaron por su querida Escuela de Enología como la despedida mutua de una institución a la que amó y que le dio todo. 

“Era una escuela increíble, pertenecía al Ministerio de Agricultura Nacional, hasta que en la época de Menen, allá por la década de los '90 pasaron a la órbita provincial y de ahí en más no recibimos dejamos de recibir ayuda”, criticó Brond en aquel entonces. “Desde Nación nos mandaban vagones con gasoil para las calderas, azúcar para la fábrica de dulce, cajones con material de vidrio para el laboratorio. Creo que fue la etapa de oro de Enología”, destacó.

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