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Orrego aseguró que el acueducto Encón–Las Trancas “está en evaluación”
El gobernador Marcelo Orrego afirmó en el Café de la Política que la obra del acueducto Encón–Las Trancas “está en evaluación”.
El gobernador Marcelo Orrego, acompañado por el vicegobernador y candidato a diputado nacional Fabián Martín, este martes, 21 de octubre, participó del programa Café de la Política del GRUPO HUARPE. Allí, entre otros temas, el jefe de Estado provincial se refirió a la posibilidad de concretar la obra del acueducto Encón–Las Trancas, una demanda histórica de más de 80 familias del sureste sanjuanino. "Por supuesto el proyecto está contemplado”, dijo, pero advirtió que no puede comprometerse públicamente hasta definir su viabilidad y financiamiento.
“Decir algo que no sé si puedo cumplir, no sería conveniente”
Al ser consultado por la posibilidad de ejecutar la obra del acueducto Encón–Las Trancas, el gobernador Marcelo Orrego fue cauto “El proyecto está contemplado y en evaluación, pero será Infraestructura, Hidráulica, Obras Sanitarias y demás organismos del Estado los que harán las evaluaciones correspondientes sobre esta obra”, señaló el mandatario y luego evitó dar una promesa concreta. “No puedo comprometerme públicamente a anunciar que se hará, ya que primero se tiene que analizar en profundidad el proyecto y definir cómo se financia. Yo pretendo siempre cumplir con mi palabra, entonces decir una cosa que por ahí no sé si la puedo realizar, no sería conveniente”, remarcó.
Orrego agregó que su gestión trabaja en “todo tipo de evaluaciones con respecto al agua potable, desde una mirada y un plan integral del manejo del agua”, destacando la importancia de planificar las obras según las necesidades y la disponibilidad del recurso hídrico en cada zona de la provincia.
Una demanda que lleva más de una década
El reclamo por el acueducto Encón–Las Trancas volvió a cobrar fuerza en los últimos meses a partir de la campaña solidaria “Unidos por el Agua”, organizada por DIARIO HUARPE junto a más de quince instituciones, organizaciones sociales, ambientales y empresas locales.
La iniciativa buscó no solo llevar asistencia, sino también visibilizar una situación crítica: más de 500 personas —entre ellas niños, ancianos, productores rurales y comunidades originarias— viven sin acceso seguro y continuo al agua potable.
El acueducto es visto como la solución estructural a un problema que se arrastra desde hace décadas y que se agravó con la desertificación de las Lagunas de Guanacache, que dejaron de recibir el caudal del río San Juan hace casi 30 años. Ese ecosistema era vital para la subsistencia y la identidad cultural de las comunidades del sureste de 25 de Mayo.
Un proyecto que espera desde 2016
El proyecto ejecutivo del acueducto está terminado desde 2016, elaborado por el Programa de Servicios Agrícolas Provinciales (Prosap) y forma parte del Plan de Obras Estratégicas 2030 de la provincia.
A pesar de eso, la obra fue prometida por sucesivos gobiernos —de José Luis Gioja, Sergio Uñac — sin que hasta el momento se concrete.
Entre 2010 y 2013, las comunidades realizaron presentaciones ante la Defensoría del Pueblo (Expedientes 20.077/10 y 22.209/13), lo que derivó en múltiples audiencias con ministerios, secretarías provinciales, el INTA, el INA y la Municipalidad de 25 de Mayo. De aquellas gestiones surgieron estudios técnicos y nuevos expedientes en Obras Sanitarias (OSSE), pero sin avances concretos.
Más recientemente, en julio de este año, los representantes de las comunidades presentaron un pronto despacho dirigido a la actual gestión de Orrego, sin obtener aún una respuesta formal.
El agua como cuestión de supervivencia
En el sureste veinticinqueño, el agua ya no es solo un derecho vulnerado, sino una cuestión de supervivencia. La zona sufre un proceso de desertificación aguda, consecuencia de la mala gestión histórica del recurso hídrico y de la pérdida del sistema lacustre de las Lagunas de Guanacache, que durante siglos alimentó a la fauna, la agricultura familiar y la vida de las comunidades huarpes que habitan en el lugar.
El gobernador explicó que su administración viene ejecutando varios acueductos en el interior profundo de la provincia, en conjunto con Obras Sanitarias (OS). Pero, asegura que primero identifican el problema, analizan la factibilidad y luego avanzan”, dijo.
Además, precisó que este tipo de obras se financian por dos vías distintas: una “por administración”, y otra mediante el fideicomiso minero, cuando los proyectos se desarrollan en jurisdicciones con actividad minera.
“Si avanzamos en este tipo de obras, lo afrontamos desde dos frentes distintos, uno por administración y otro por fideicomiso minero”, concluyó Orrego.
Una esperanza que aún depende de decisiones políticas
El paso de Orrego y Martín por el Café de la Política dejó en claro que el acueducto Encón–Las Trancas no está descartado, pero tampoco confirmado. Mientras las comunidades esperan una respuesta concreta, la provincia continúa evaluando su factibilidad técnica y financiera.
En un territorio donde el agua marca la frontera entre la vida y el éxodo, el reclamo sigue siendo el mismo: que la promesa de una obra vital deje de ser un expediente y se transforme en una realidad tangible.