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Provinciales

La Casa de la Bondad, un hogar de amor y contención para el último adiós

Todas aquellas personas con enfermedades terminales, con pocos recursos o que la familia haya claudicado a sus cuidados, tienen en la Casa de la Bondad, un hogar donde sentirse amado y cuidado en los últimos tramos de la vida.

08 de octubre de 2014

El 11 de octubre se conmemora el Día Mundial de los Cuidados Paliativos, y en San Juan, la Casa de la Bondad es la única institución habilitada para brindar cuidados y contención a aquellas personas que transitan, debido a enfermedades terminales, los últimos momentos de su vida.

La Casa de la Bondad u hospice, es una institución avalada por el Ministerio de Salud Pública y la cual tiene por objetivo el cuidado de aquellas personas que transitan el final de su vida. “En la Casa de la Bondad damos una atención integral, holística y espiritual, donde se respetan todas las creencias. No solo se cuida y atiende el cuerpo sino también el alma de cada persona que llega”, indicó a DiarioHuarpe.com la titular de la entidad, Mirtha Cuadros.

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Esta casa, que fue inaugurada el 1 de noviembre de 2012 y que funciona sobre avenida Paula Albarracín de Sarmiento al 777 sur, es la única en la provincia en brindar cuidados paliativos. Cuenta con un total de 110 voluntarios de todas las edades, muchos de ellos jóvenes,  que se reparten en distintas áreas como cocina, lavandería, secretarías, cuidadores y salud.

El área de salud está coordinada por profesionales médicos, el cual lidera el doctor David Pérez. Este equipo está conformado por seis enfermeras, un nutricionista, tres asistentes sociales, dos psicólogos y un acompañante terapéutico.

“A los  ‘patroncitos’ (NdR: como les dicen cariñosamente a los pacientes de la casa) se les da la mejor atención, ya sea con gestos sencillos y concretos como quedarse a charlar o simplemente darle la mano. Los voluntarios dan la mejor atención, amor y contención para con los pacientes y sus familiares, aseguró Cuadros y contó de una frase que se usa mucha en la Casa: Brindamos una droga que se llama amor.

“La intención es darles la mejor calidad de vida mientras transitan la última parte de la misma”, cuenta la titular de la Casa de la Bondad, que forma parte de la Fundación Manos Abiertas que preside el padre Ángel Rossi.

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Quiénes llegan a la Casa de la Bondad, usualmente son pacientes derivados desde los hospitales Guillermo Rawson y Marcial Quiroga, pero también pueden ser particulares. En este caso hay dos criterios para aceptar al paciente.

“Cuando llama un particular un equipo analiza la situación. Por un lado está el criterio médico y por el otro, el social. Ahí se tiene en cuenta que la familia o ámbito del enfermo no tenga resguardo económico o que la propia familia haya claudicado en sus cuidados”.

Hoy por hoy, la Casa de la Bondad cuenta con una infraestructura grande para albergar a no más de cinco “patroncitos” y la idea es ampliar esa cantidad. construyendo de a poco otras habitaciones. “Todo lo hacemos a pulmón”, destacó Cuadros.

Para aquellos que deseen ser voluntarios o que estén pasando por una situación que requiera de los servicios de la Casa de la Bondad, pueden acercarse por la sede, ubicada en las inmediaciones de calle Estados Unidos y San Luis, o por avenida Paula Albarracín de Sarmiento 777 (sur), entre Central y Córdoba. También se puede llamar telefónicamente al 4267459 o por correo electrónico a casadelabondad.sj@manosabiertas.org.ar.

Dar a conocer

En el marco del día mundial de los cuidados paliativos, el voluntariado de la Casa de la Bondad está organizando una serie de actividades para dar a conocer de que se tratan los cuidados y las tareas que se realizan desde la entidad.

Aunque aún no está finiquitado, entre las actividades previstas se encuentra la entrega de folletería y charlas en un punto neuralgico de la provincia, realizar pinturas y juegos con chicos, murgas, entre otras cosas.

Por Juan Manuel Gómez López

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