Publicidad

Provinciales > Efectos del virus

A tres meses del brote, ocho geriátricos sanjuaninos tienen activo el protocolo por abuelos con Covid

Muchos de los contagiados cumplen el aislamiento dentro de las residencias.

19 de noviembre de 2020

Hace tres meses San Juan iniciaba un proceso de escalada de casos de coronavirus tras el brote que se registró en el departamento Caucete. El virus no tan sólo se extendió en ese ejido territorial, sino que viajó hacia Santa Lucía y también entró a dos geriátricos en el departamento Rawson. En estos dos últimos establecimientos causó una serie de fallecimientos debido a que atacó principalmente a la población de riesgo.

Con el correr del tiempo, esos dos geriátricos se fueron normalizando en cuanto a la atención de los adultos mayores y también la reincorporación del personal. Sin embargo, la enfermedad se fue propagando y las autoridades debieron activar el protocolo en ocho residencias sanjuaninas.

Publicidad

Esta medida significó que debían evaluar las condiciones habitacionales para que los abuelos cumplieran el aislamiento estricto dentro de esa comunidad cerrada. Esto se entiende debido a que ellos tienen su residencia habitual allí. Para establecer este confinamiento deben tener en cuenta algunos conceptos: zonas de distanciamiento y la condición sanitaria del paciente.

“Tenemos que recordar que la residencia es el domicilio permanente de un abuelo. Si llevamos a cabo todas las medidas sanitarias, ellos también pueden cumplir el aislamiento en ese lugar”, comentó a DIARIO HUARPE Jorge Quiroga,  director de Regulación y Control de Gestión.

Actualmente en la provincia hay 31 geriátricos habilitados. Todos cumplieron con determinadas normativas para lograr su apertura. Estos espacios son controlados asiduamente por personal de Salud Pública que los monitorea por video y una línea especial de WhatsApp. Lo que intentan impedir es el incumplimiento a las medidas de seguridad.

En el caso de que un abuelo no pueda quedarse en confinamiento en esa residencia debido a un agravamiento del cuadro sanitario, los directivos los clasifican entre robustos, frágiles y prefrágiles, según comentó a este medio hace algunas semanas el secretario de Medicina Preventiva, Matías Espejo. Con eso se logra la internación en algunos de los nosocomios locales de acuerdo al grado de la enfermedad: leve, moderado o crítico.  

“Una vez realizada la evaluación o el diagnóstico del paciente, se hace un fortalecimiento de las medidas preventivas para frenar el impacto del virus en toda la residencia”, explicó Quiroga.

Control y activación

El funcionario comentó que constantemente realizan un seguimiento de las condiciones sanitarias de los geriátricos. En el caso de advertir alguna irregularidad, inmediatamente dan aviso  a los directivos para que solucionen de manera inminente el inconveniente.

Publicidad

“Hay un sistema de comunicación por medio de WhatsApp para activar los protocolos de contingencia y aclarar dudas. Se trabaja con los directores en cuanto a la provisión de insumos y el correspondiente aislamiento”, relató Quiroga. 

En el supuesto de que un adulto presente los síntomas característicos del coronavirus, es asistido por personal sanitario y si requiere ser trasladado se solicita ayuda a las autoridades del Ministerio de Salud Pública.

Recomposición

“Volver a empezar”, dice la canción. Tras la activación del protocolo y la posterior cura de los pacientes, las residencias deben ponerse nuevamente a punto. Si bien su actividad no decae en tiempos activos, Quiroga comentó que el personal de por sí tiende a disminuir su incidencia para frenar la propagación del virus.

Pasada esa etapa, los asistentes se reincorporan dejando atrás el miedo o también superando la enfermedad, si es que pasaron por un proceso de confinamiento obligatorio por tener el virus en el organismo.  

Publicidad
Más Leídas
Publicidad