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Provinciales > Historias sanjuaninas

Una vida de tracción a sangre

Su sustento era con la carretela y hoy se reconvirtieron.

Por Gonzalo Medina
29 de julio de 2020

Fotos: Gonzalo Medina
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La historia de las carretas tiradas por caballos está ligada a la vida del país. En torno a ellas giraban diversas actividades como la economía doméstica de las familias que se dedicaban a andar por las calles vendiendo verduras, achuras o leña.

Hoy sin añoranza por un tiempo que pasó, los carreteleros están en un proceso de extinción, su circulación está prohibida por el Decreto Provincial N.º 1574/15 y algunos han empezado su reconversión, como Raúl y su hijo (también llamado Raúl), que siempre estuvieron ligados a una carretela atada (caballo y carreta), y conocen los pormenores de una vida de tracción a sangre. El padre vivió, y crió a sus hijos, vendiendo diferentes productos en una carretela.

Cuando los niños crecieron les regaló a cada uno de ellos lo que para él conformaba su universo, una carretela atada. El hijo, ya adulto, con el regalo del padre se dedicó a lo que aprendió, la venta por las calles. Hoy los dos lograron una reconversión en cuanto a su forma de sustento económico. Raúl Alaniz padre puso un almacén y Raúl hijo se compró una camioneta que trabaja como taxiflet. Este pasaje se produjo por varios factores, entre ellos el derecho del animal.

Raúl hijo comentó a DIARIO HUARPE que “los carreteleros están en un estado de vulnerabilidad económica, por lo que comprar un vehículo es imposible y también es muy alto el porcentaje de analfabetismo, lo que les impide sacar un carnet de conducir. Todos los que se dedican a esta actividad se conocen, pero no están agrupados, tampoco hay un registro de ellos o sus animales, aunque hay municipios que intentan poner en marcha programas para trabajar en conjunto.

Hoy el Covid-19 ha dejado todo en cero, una buena oportunidad para iniciar un camino sin maltrato animal, sin estigma social para los carreteleros, para trabajar en conjunto con los municipios algún tipo de acuerdo que les permita transitar, capacitándose en el cuidado del animal, para que aquellos en condiciones vulnerables puedan mejorar su calidad de vida.

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