Judiciales > Pica en el Penal
El reo cuestionado por policías presos rompió el silencio
El texto de dos carillas llegó a la redacción de DIARIO HUARPE. La carta completa al final de la nota.
Por Germán González
El interno del penal de Chimbas, Ramón Roque Escudero, contestó a los policías presos que cuestionaron su presencia en el pabellón. El hecho tomó público conocimiento en DIARIO HUARPE tras que los padres de los uniformados denunciaran ante medio que la convivencia en complejo carcelario se agravó con el arribo del reo condenado por homicidio. Hablaron hasta de amenazas a sus familias. En ese contexto Escudero y un compañero de pabellón hicieron llegar a la redacción una carta con su descargo. La misma contiene durísimos términos para quienes lo acusaron.
El texto tiene como título “Carta abierta a la sociedad para debatir” y surgió en respuesta al reclamo de los policías que se quejaron de su presencia en el Pabellón I del Sector II.
En una carta, los efectivos que cumplen condena revelaron que Escudero llegó allí por ser una persona conflictiva, que trajo sus problemas a ese sector y pidieron una pronta solución al director del Servicio Penitenciario Provincial, Adriel Fernández, y a la jueza de Ejecución Penal, Lidia Reverendo.
En este sentido, respondió Escudero con “términos durísimos”. “Somos la mitad de los internos que habita en el Pabellón I del Sector II. Queremos contar la verdad de lo que está sucediendo en el mismo debido a las falsas acusaciones contra el interno Ramón "Rocke" Escudero”, empezó el escrito.
Luego, con la carta, Escudero y su compañero Raúl Edgardo Benítez relataron cómo se divide, según su versión, la cárcel: “Actualmente, este pabellón está dividido en dos. Una parte está integrada por internos que velan por la progresividad, la reinserción, la autodisciplina a través de la formación académica, laboral, deportiva y sobre todo la asistencia espiritual, la que conlleva a la concientización y el arrepentimiento de los delitos cometidos”.
Los reos se involucraron en esa mitad y ejemplificaron diciendo que Benítez está estudiando para ser abogado, mientras que Escudero terminó la capacitación de carpintería y estudia para finalizar el secundario y capacitarse en metalúrgica. Con esto quisieron tirar por tierra de que están en el lugar por ser rechazados en otros pabellones.
Posteriormente a esto, comienza la parte más fuerte del escrito. Los internos se refieren a sus compañeros policías sobre la base de los delitos por los que fueron condenados.
“Y la otra parte está integrada por una banda de misóginos, consolidado por el tráfico de influencia y conformado por violadores, pedófilos, femicidas y que está al mando del interno Jesús Rodolfo Elizondo, que lleva 16 años detenido por matar a un niño de cuatro años, que tiene a su mujer M.P. (no se la menciona para cuidar a una menor) detenida en la alcaldía de mujeres condenada por corrupción de menores. Los mismos tienen una hija que se la sacaron luego de que un pediatra constatara que era abusada por la madre. Otros internos sobresalientes de este grupo son los femicidas Mathías Mallea y Carlos Moreta, los violadores Daniel Eduardo Trigo (el rugby condenado a siete años), y Andrés Montaño (condenado a 20 años), el pedófilo Ariel Héctor Gamero, entre otros”.
“Queremos contar a la sociedad que en ninguna parte del Código Penal y leyes carcelarias hace referencia a que tiene que haber un pabellón para policías y en el Servicio Penitenciario Provincial no existe tal caso”, prosiguieron.
Y aseguraron que se encuentran en el mejor pabellón del penal de Chimbas, por ser el más tranquilo. Aclararon que hay tanto civiles como policías y que están reubicados allí todas las personas que tienen ganas de estudiar y recuperarse socialmente.
Finalmente, señalaron que algunos policías no viven “a flor de piel” la verdadera cárcel, como sí la padecen personas por delitos menores a los cometidos por ellos.
Y dieron un ejemplo con la pareja de Celeste Luna: “Mathías Mallea, actualmente condenado a perpetua por femicidio, está gozando de vivir en un pabellón extramuro que escapa totalmente al contexto de prisionilización”.
Escudero y Benítez, al contrario de los policías presos y sus familiares, destacaron el trabajo del director del penal de Chimbas y de la jueza de Ejecución Penal. “Están realizando una buena tarea demostrando que no hacen excepción de persona y fomentando un sistema igualitario e integrador”, escribieron.
La carta llegó a la redacción de DIARIO HUARPE traída por la pareja de Benítez. Contó que las verdaderas víctimas todo esto eran los dos internos acusados en principio. La pica en el Servicio Penitenciario Provincial parece que recién empezó.
El texto completo
Carta abierta a la sociedad para debatir
“Somos la mitad de los internos que habita en el Pabellón I del Sector II. Queremos contar la verdad de lo que está sucediendo en el mismo debido a las falsas acusaciones contra el interno Ramón "Rocke" Escudero”.
Actualmente, este pabellón está dividido en dos. Una parte está integrada por internos que velan por la progresividad, la reinserción, la autodisciplina a través de la formación académica, laboral, deportiva y sobre todo la asistencia espiritual, la que conlleva a la concientización y el arrepentimiento de los delitos cometidos.
En fin, internos que en verdad buscan volver a la sociedad como personas sujetas a derecho, respetando los preceptos y estatutos para formar parte de la sociedad y así volver aportar al estado y resarcir, aunque sea, una parte de los daños cometidos.
Algunas de las cosas más sobresalientes es el caso del interno Raúl Emanuel Benítez, que está estudiando la carrera de Abogacía a punto de recibirse de procurador, como así también el interno Ramón “Rocke” Escudero, que está cursando una capacitación laboral y orientación metalúrgica, tiene el título de carpintería y está terminando el secundario como tantos otros también que están estudiando y aprendiendo el oficio.
Y la otra parte está integrada por una banda de misóginos, consolidado por el tráfico de influencia y conformado por violadores, pedófilos, femicidas y que está al mando del interno Jesús Rodolfo Elizondo, que lleva 16 años detenido por matar a un niño de cuatro años, que tiene a su mujer M.P. (no se la menciona para cuidar a una menor) detenida en la alcaldía de mujeres condenada por corrupción de menores. Los mismos tienen una hija que se la sacaron luego de que un pediatra constatara que era abusada por la madre. Otros internos sobresalientes de este grupo son los femicidas Mathías Mallea y Carlos Moreta, los violadores Daniel Eduardo Trigo (el rugby condenado a siete años), y Andrés Montaño (condenado a 20 años), el pedófilo Ariel Héctor Gamero, entre otros.
Queremos contar a la sociedad que en ninguna parte del Código Penal y leyes carcelarias hace referencia a que tiene que haber un pabellón para policías y en el Servicio Penitenciario Provincial no existe tal caso.
En el Pabellón I del Sector II conviven tanto expolicías como así también civiles, que están por distintas causas, ya que es el mejor pabellón de todo el penal, debido a que tanto el director Adriel Fernández como la excelentísima juez de Ejecución Penal Lidia Reverendo están modificando y reubicando a algunos internos para que el pabellón sea utilizado solo para internos que estudian, trabajan y en verdad quieren volver a resocializarse, porque en los distintos sectores del Servicio Penitenciario Provincial están distribuidos internos con un delito y pena menor sufriendo a flor de piel el verdadero contexto de encierro, mientras que otros como por ejemplo el interno antes mencionado: Mathías Mallea, actualmente condenado a perpetua por femicidio, está gozando de vivir en un pabellón extramuro que escapa totalmente al contexto de prisionilización.
Es por todo expresado que sentimos la necesidad de contar la verdad y dejar tranquila a la sociedad y a las víctimas de estos psicópatas que se camuflaron detrás de un informe y que también el director y la juez de Ejecución están realizando una buena tarea demostrando que no hacen excepción de persona y fomentando un sistema igualitario e integrador.