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Economía > Potencial productivo

Industriales no encuentran galpones en San Juan para instalarse

El impulso de los nuevos proyectos mineros requiere de infraestructuras grandes y equipadas, que en San Juan son escasas. Hay demoras de por lo menos seis meses para alquilar.

05 de septiembre de 2023

Los proveedores e industrias asociadas a la minería necesitan de galpones de más de 1.000 m², con acceso fácil a la ruta y con equipamiento moderno. Pero estas naves son muy pocas y el mercado inmobiliario sanjuanino ya quedó corto e incluso podría hacer que algunas de estas inversiones terminen instalándose fuera de la provincia.

Leonardo Pérez Tinto, de la inmobiliaria Pérez Olivera, explicó que en la actualidad conseguir un espacio apto para este tipo de actividad económica puede demorar de seis meses en adelante. Esto se debe a que no existe una gran cantidad en la provincia que cumplan con el tipo de características necesarias. A esto se suma que los avances recientes de los proyectos mineros Josemaría, Los Azules y Hualilán, aumentaron la cantidad de emprendimientos comerciales que los buscan.

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Uno de los requisitos es el acceso a rutas y una playa de maniobras amplia.

Pérez Tinto detalló que los que más buscan son empresarios vinculados con la logística, el almacenamiento y la venta de maquinaria grande, porque prefieren tener las oficinas donde dejan el stock. “San Juan nunca fue un gran centro logístico, como si lo fue Mendoza con la ruta a Chile, pero ahora con la minería es necesario”, aseguró. Alertó que, si se activan estos proyectos en exploración, el mercado quedará aún más chico.

Si bien en el inicio de la minería del oro hubo migración de algunas empresas, los proyectos de cobre y litio requieren de más proveedores o distintos a los que había. Además, algunos sectores agroindustriales como el pistacho o el tomate para industria también están requiriendo maquinaria y las empresas que la venden coparon parte del stock de galpones.

Qué tipo de galpones están buscando

El tipo de galpón que están buscando los empresarios, la mayoría vinculados a venta de maquinaria y equipamiento de gran tamaño, pero también a producción industrial, debe en principio superar los 1.000 m². En algunos casos llegaron buscando espacios que superen los 3.000 m² o hasta 10.000 m².

Además de esto deben tener acceso a rutas principales, en especial buscan ubicadas sobre la Ruta 40 tanto al norte como al sur de la ciudad y en la Ruta 20. Esta última suma otra complejidad: la zona entre avenida de Circunvalación y el Monumento al Gaucho no tiene salidas directas a la calzada.

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Encontrar un lugar con autorización de bomberos, con la altura y tamaño adecuados, puede demorar 6 meses.

Otros de los requisitos que buscan los empresarios es que la estructura tenga más de tres metros de altura, habilitaciones de bomberos o cumplir con los requisitos para lograrla, instalación eléctrica industrial y una playa de maniobras de gran tamaño. Todo esto hace que algunos galpones espaciosos, como por ejemplo viejos supermercados, no puedan ser alquilados porque no fueron construidos como naves industriales.

Solo la inmobiliaria de Pérez Tinto tiene cinco clientes a la espera de que aparezcan espacios aptos para esta finalidad. “Buscan alquilar entre 1.500 y 10.000 m², pero no hay disponibles y los que existen no cumplen las condiciones”, aseguró. El empresario inmobiliario contó que recientemente un cliente mendocino que buscaba trasladarse a San Juan, lo que significaría puestos de trabajo locales, se vio desalentado por la falta de galpones.

Los precios de los grandes galpones

El alquiler de una nave apta para trabajo industrial está entre los $1.500 y $1.800 el metro cuadrado. En general los contratos se hacen por mínimo tres años, pero la mayoría firma por cinco años.

Debido a la falta de oferta, se reactivó en parte la construcción de estos espacios, pero la misma cuesta por encima de los US$500. Debido a la crisis económica y la dificultad para conseguir financiamiento o incluso materiales de construcción, son muy pocos los emprendimientos que lo están haciendo.

Montar un galpón con el tamaño y las características necesarias demora alrededor de un año, por lo que el miedo de los empresarios inmobiliarios e industriales, es que no puedan poner a punto la oferta cuando avancen los proyectos mineros. Esto podría costarle muy caro a San Juan, porque si las empresas proveedoras no pueden instalarse de forma local significa menos puestos de trabajo locales y menos movimiento económico.

Sobre Ruta 40 un emprendimiento inmobiliario construyó construye una nave industrial.

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