País > Investigan motivos
Confirman la muerte de un padre y su hijo que estaban desaparecidos en Córdoba
Tras dos días de intensa búsqueda, se confirmaron los fallecimientos de Cristian Fink, de 37 años, y su hijo Álvaro, de 3, en el Dique El Cajón, Córdoba. La investigación apunta a un accidente durante un paseo junto al río.
POR REDACCIÓN
Los cuerpos de Cristian Sergio Fink, de 37 años, y su hijo Álvaro Fink Olariaga, de 3, fueron hallados este jueves por la tarde en el Dique El Cajón, Córdoba, tras un operativo policial que duró dos días. Según informaron fuentes del DUAR y la policía provincial, ambos cuerpos se encontraban enganchados entre ramas a varios metros de profundidad.
La desaparición se había producido el 10 de septiembre, cuando padre e hijo fueron vistos por última vez en la zona del río, lugar habitual de paseo para la familia. Según relataron los familiares, habían salido a “tirar piedras al río”, una actividad recreativa que solían compartir.
La primera alerta surgió cuando Cristian no regresó a su domicilio y no atendía el teléfono. La familia comenzó una búsqueda propia y encontró el automóvil del hombre, un Chevrolet Aveo gris, estacionado a unos 600 metros del balneario Águila Blanca, sin señales de violencia ni de forzado.
Tras el hallazgo del vehículo, las autoridades coordinaron un amplio operativo que incluyó más de cien efectivos de Policía de Córdoba, Bomberos Voluntarios, DUAR y ETAC, además de buzos, rastreadores, perros entrenados y drones. Las tareas fueron supervisadas por la Fiscalía de Cosquín, a cargo del doctor Nelson Lingua.
Lorena, esposa de Cristian y madre de Álvaro, relató el dolor vivido durante las horas de incertidumbre. “Salieron de casa como otras veces para ir a la playa, a jugar, a tirar piedritas. Como no volvían, porque se fueron a las 6 de la tarde y se puso frío, yo los llamé y no contestaban”, señaló.
Por el momento, la principal hipótesis que maneja la Fiscalía es que el niño pudo haber quedado atrapado en el dique y que el padre intentó rescatarlo, aunque la investigación continúa para esclarecer los hechos. La familia descartó cualquier vínculo con conflictos externos o ajustes de cuentas, y destacó que Cristian era ampliamente conocido por su labor como técnico de reparación y servicio de máquinas.