Política
Marcha de la CGT: Monteoliva aplicará el protocolo antipiquetes en su debut como ministra
A días de asumir al frente del Ministerio de Seguridad, Alejandra Monteoliva enfrentará su primera prueba clave con una masiva movilización de la CGT y un paro de ATE en rechazo a la reforma laboral impulsada por el Gobierno de Javier Milei.
POR REDACCIÓN
A pocos días del traspaso de mando en el Ministerio de Seguridad, Alejandra Monteoliva tendrá este jueves su primer desafío de alto impacto político y social, con una masiva movilización convocada por la Confederación General del Trabajo (CGT) y un paro de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) en la Ciudad de Buenos Aires.
Según confirmaron fuentes oficiales, el Gobierno garantizará la aplicación del protocolo antipiquetes y desplegará un operativo especial para controlar el microcentro porteño, donde se espera la mayor concentración de manifestantes. En sus primeros pasos como ministra, Monteoliva decidió sostener la estrategia y los lineamientos establecidos por su antecesora, Patricia Bullrich.
“Se aplicará el protocolo como siempre porque en el ministerio no cambió nada”, aseguraron desde la cartera de Seguridad, en la antesala de la protesta que comenzará alrededor de las 15. La ministra ya había anticipado que los esquemas operativos se mantendrán y se definirán de acuerdo con la magnitud y características de la convocatoria.
Desde el Ministerio explicaron que la orden de servicio (que establece la cantidad de efectivos, el perímetro de seguridad, los turnos y la coordinación con el Ministerio de Seguridad porteño) aún no fue emitida, aunque se espera que quede definida en las próximas horas.
El operativo incluirá un sistema de alerta temprana que se activará durante la mañana, tareas de seguimiento preventivo y acciones de encapsulamiento. El objetivo central será evitar cortes de calles y el colapso del tránsito vehicular, permitiendo la movilización por veredas y concentraciones en plazas o parques. En el caso de columnas numerosas, la consigna será mantener a los manifestantes en movimiento para impedir bloqueos prolongados en las principales arterias.
La movilización de la CGT tendrá como destino final la Plaza de Mayo y se enmarca en un plan de lucha que la central obrera definió como de “medidas graduales” contra el Gobierno nacional. Al reclamo contra la reforma laboral se sumaron partidos de izquierda y distintos gremios, que estiman una concurrencia cercana a las 150 mil personas.
El despliegue de seguridad de este jueves será clave para marcar el rumbo de la gestión de Monteoliva y medir la respuesta del Gobierno frente a un escenario de creciente conflictividad social.