Sin cena y con transmisión en vivo: así será la Cata de Vinos 2020

La Cata de Vinos que organiza el Consejo de Enólogos de San Juan no tendrá el formato habitual este 2020, debido a las dificultades sanitarias que plantea el Covid-19. En lugar de la cena para unos 500 invitados, los organizadores arman una versión que se transmitirá en vivo, pero a la que sólo asistirán un puñado de personas. 

Según confirmó a DIARIO HUARPE Marcelo Ureta, gerente del Consejo Profesional de Enólogos, la fecha elegida para comunicar los premios es este 24 de noviembre, el Día de Vino Bebida Nacional. A pesar de las dificultades, explicó el profesional, será un festejo tanto por la fecha como por los buenos resultados en las ventas que ha tenido el sector este año. 

Si bien hubo una baja en la cantidad de muestras recibidas, las bodegas participantes superaron levemente las expectativas que había. Es que en total hay 280 vinos que estuvieron catando los enólogos sanjuaninos desde septiembre a ahora. En agosto preveían que iban a ser alrededor de 250, por lo que la cantidad de participantes no defraudó. Han llegado a San Juan muestras de otras provincias también, que esperan llevarse los reconocimientos y tal vez alcanzar un Gran Oro. 

Ureta remarcó que lo más importante en esta instancia es que los sanjuaninos y todo el país conozca cuáles han sido los mejores vinos de la cosecha. Los reconocimientos sirvan, además de una forma de valorar el trabajo de bodegas y enólogos, como una guía para el consumidor, que al comprar alguno de los vinos sabe que tienen una garantía de calidad. 

La previa, lo que se robó la pandemia 

Si bien las bodegas tendrán su reconocimiento, los enólogos sanjuaninos tuvieron que extrañar este año parte del folclore clásico de la Cata de Vinos. Se trata de todo el proceso de análisis de muestras, que siempre significó un momento de reunión entre los profesionales. 

En lugar de los encuentros de decenas de colegas, este año la cata fue prácticamente en privado, con capacidad reducida dentro de los salones del consejo y en grupos mucho más pequeños. Lo que antes eran reuniones en las que se discutía la cosecha y la actualidad del sector, este año terminó atravesado por el protocolo, distanciamiento, barbijos y alcohol en gel.

El coronavirus también causó dificultades en la logística de la llegada de las muestras. El mayor problema estuvo con los vinos que debían viajar desde otras provincias, que quedaron atrapados en las exigencias de los límites. Esta es una de las razones por las que la cantidad de participantes bajó de más de 340 a las 280 actuales.