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Taxista partero: Rolando, el sanjuanino que ayudó a una pareja a dar a luz en la puerta del hospital

Tiene 53 años y dice que es el segundo parto que le toca presenciar. Los padres del niño lo eligieron como padrino.

02 de enero de 2021

Rolando Contreras tiene 53 años, es del barrio Rivadavia Sur, y dice que prácticamente formó su vida arriba del taxi. El sanjuanino lleva más de 25 años trasladando gente de un lugar a otro, pero arrancó el 2021 de una manera particular: le tocó colaborar de ceca en el proceso de la llegada de una nueva vida. 

“Es una sensación inexplicable la que se vive en un momento como ese. La palabra ‘lindo’ queda chica”, contó el taxista a DIARIO HUARPE.

Su aventura comenzó cuando estaba esperando en la esquina de San Miguel y República del Líbano, justo en una iglesia evangélica. Un árbol frondoso le daba la sombra que necesitaba para descansar algunos minutos luego de una noche agitada que tuvo por la fiesta de Año Nuevo. Rolando relató que trabajó con normalidad y tuvo varios pasajes durante la madrugada.

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A los 100 metros notó que un hombre estaba nervioso y se paseaba de un lado a otro buscando ayuda. Rápidamente se acercó hasta él y vio que su pareja estaba sentada en la vereda con dolores abdominales. El taxista se percató que la mujer estaba embarazada y fue ella quien le contó que empezó con contracciones.

Sin dudarlo un instante, Rolando subió a la pareja al taxi. Explicó que Jorge Emanuel Arrieta (25), padre de la criatura, estaba ansioso por ver nacer a su hijo. El taxista le recomendó que se sentaran en la parte trasera del vehículo, de acuerdo a lo que indica el protocolo sanitario de coronavirus, y le hiciera masajes en la cabeza a su pareja, Melani García (19), para tranquilizarla.

Rolando comentó que en esos momentos se sintió ‘un héroe’. Sin embargo, destacó que ya había tenido otro procedimiento similar hace algunos años en la provincia de Mendoza. Aunque con este viaje le pasó algo diferente debido a que el bebé nació, con ayuda de su padre, en el asiento trasero de su vehículo, mientras que el mendocino alcanzó a ver la luz dentro de la maternidad del hospital.

El tiempo apuraba. Las contracciones cada vez eran más fuertes. De repente Rolando observó un patrullero y le comentó la situación. Los efectivos se pusieron delante de su auto y le fueron abriendo paso hasta llegar al Servicio de Urgencias del Hospital Guillermo Rawson.

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El parto era de riesgo. Los planes no salieron como la pareja pensó, sino que el alumbramiento se adelantó bastante. Melani estaba cursando recién el sexto mes de embarazo, pero inició con fuertes dolores que la remontaron a lo que le sucedió cuando tuvo a su otro hijo con apenas cinco meses.

El mediodía se acercaba y con él se volvían más intensos los quejidos de Melani dentro del taxi. A las 12.10 un grito alertó al taxista que estaba justo ingresando por el sector de las ambulancias. “Ahí viene”, fue lo que dijo Arrieta y ya no hubo tiempo para más.

Melani dio a luz a su bebé con ayuda de su marido justo en el asiento trasero del vehículo. La sorpresa es que ellos esperaban una nena a la que ya le habían asignado de nombre Kiara, pero les llegó un varón. Rolando convocó a algunos médicos del nosocomio.

El asiento del auto fue el lugar en donde nació el pequeño de apenas seis meses de gestación. Foto: gentileza Jorge Emanuel Arrieta.

Inmediatamente personal de salud del Hospital Guillermo Rawson bajó hasta el taxi y cortó el cordón umbilical. El niño pasó a terapia intensiva debido al escaso periodo de gestación.

La mamá del bebé ingresó al hospital donde quedó internada. Foto: gentileza Jorge Emanuel Arrieta.

Rolando y Jorge Emanuel terminaron fundiéndose en un abrazo. El taxista no le cobró el pasaje y lo esperó hasta que salió del hospital. Juntos fueron hasta la casa de la suegra del flamante padre para buscar algunas prendas de vestir para pasar el primer día del año custodiando a su bebé que quedó internado.

Rolando (barbijo negro) y Jorge (remera amarilla) se abrazaron cuando el parto concluyó. Foto: gentileza Rolando Contreras.

Desesperado, pidió en redes sociales cadenas de oración por la salud del pequeño. Si bien su pareja ya tiene otro bebé, Jorge Emanuel se convirtió en papá primerizo.

“Voy a luchar porque mi hijo se recupere. Tengo fe que va a salir adelante”, indicó en diálogo con DIARIO HUARPE.

La pareja aprovechó el momento y hubo selfie. Foto: gentileza Jorge Emanuel Arrieta.

El futuro nombre y el padrinazgo

Jorge Emanuel explicó que con su pareja piensan ponerle Rolando al bebé en honor al taxista que los ayudó en ese momento clave. Entienden que el trabajador reúne todos los valores para que su niño sea un hombre de bien.

“Es un taxista que vale oro. No nos pidió nada a cambio y eso dice mucho de una persona”, relató.

Sumado a darle el nombre, Jorge Emanuel dijo que hablaron con Rolando para que sea el padrino de su hijo. El taxista, casado y con cinco hijos, aceptó y ya hubo intercambio de teléfonos.  Esperan que el niño se recupere para hacer un festejo entre ambas familias.

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