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El salto devaluatorio no ayudó a las exportaciones, que siguen sin reaccionar
Crecieron 7,5% respecto del mismo mes de 2018 pero cayeron 2,3% en términos desestacionalizados. Sólo despegaron las ventas externas de productos primarios, y combustibles y energía. El superávit comercial terminaría el año en torno a los u$s 12.000 millones
POR EL CRONISTA PARA DIARIO HUARPE
El primer dato de comercio exterior tras el nuevo escalón devaluatorio que se disparó tras las PASO del 11 de agosto, no trajo sorpresas. Se mantiene el saldo positivo en la balanza comercial, más por defecto que por virtud, en el contexto de una economía que aún navega en las aguas turbulentas de la recesión.
De acuerdo al relevamiento difundido esta tarde por el Indec, las exportaciones totalizaron en agosto u$s 5568 millones, un avance del 7,5% respecto del año anterior, en tanto que las importaciones llegaron a u$s 4400 millones, un desplome del 30,3% en términos interanuales.
Así, el saldo de la balanza comercial se ubicó el mes pasado en u$s 1168 millones, más o menos en línea con el desempeño de los meses precedentes.
De esta manera, en el acumulado del año el superávit comercial trepa a u$s 7708 millones, un dato que contrasta con el déficit de u$s 6767 millones que se había observado entre enero y agosto de 2018.
Contabilizados ocho meses la balanza comercial argentina se encamina a finalizar el año con un superávit cercano a los u$s 12.000 millones. Será el primer año con saldo positivo desde 2016, cuando se registró un resultado de apenas u$s 2124 millones.
En este escenario aparecen varias luces amarillas. Por un lado, como en los meses anteriores, es claro que el superávit comercial se debe casi exclusivamente al desplome de las importaciones por el profundo proceso recesivo.
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Esta situación termina impactando en el intercambio comercial -exportaciones e importaciones-, que arrojó una baja del 13,2% frente al mismo mes del año anterior.
El otro tema relevante es que las exportaciones no explotaron por el incremento adicional de casi 30% de devaluación del peso. Más bien se mantuvieron en el mismo andarivel de los meses precedentes.
Sólo se registró un salto importante del 38,6% interanual en agosto, en las exportaciones de productos primarios. También hubo un avance en combustibles y energía, pero ciertamente, se trata de un segmento con una participación menor en el total, apenas el 5,6% de las exportaciones.
El resto, mientras los bienes agroindustriales crecieron 0,6%, las manufacturas de origen industrial cayeron 8%. Entre estos dos rubros representan dos tercios de las exportaciones totales (67,5%).