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Sequía en San Juan: buscan frenar el robo de agua de los canales con camiones
Roban agua en camiones para llenar piletas: cada una equivale una hectárea de finca.
Por Carolina Putelli
Mientras los productores e Hidráulica buscan hacer rendir el agua de diques y canales cada día, en medio de la peor sequía de la historia de San Juan, al costado de los canales en verano aparecen día a día, camiones cisterna tomando el agua de riego. En el canal Benavidez cerca de calle Necochea y en el Céspedes a la altura del Médano de Oro es donde se los ve habitualmente. Un porcentaje alto de estos, creen las autoridades que lo hacen sin habilitación, por lo tanto, robándose el agua de los productores.
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Parece una extracción menor, pero cada camión puede cargar 10.000 litros de agua en cada viaje. Es el equivalente al turno de riego que se le otorga a una superficie cultivada de 0,35 hectáreas. Turnos que por la sequía son a cada 10 o 12 días, según la zona.
Uno de los usos comunes de quienes retiran agua sin permiso es para piletas domiciliarias, aunque también lo hacen para recargar reservorios o mojar accesos de tierra. En San Juan las piscinas más vendidas son las que tienen 3 metros por 6 de lado y en estas entran alrededor de 27.000 litros, el equivalente de casi tres camiones. Para llenar cada una se extrae lo mismo que un finquero podría usar para regar una hectárea productiva.
En épocas con más agua casi nadie denunciaba esto, porque lo veían como algo “normal”. Pero con la sequía actual y la fuerte racionalización de turnos de riego, se ha convertido en un problema. Cada litro extraído significa menos riego para productores cuyos cultivos sufren desde hace años los efectos de la falta de agua, de cortas prolongadas y un coeficiente menor.
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Esto se repite constantemente y para Hidráulica frenarlo es una prioridad, pero también una tarea difícil. Por eso, este martes en la reunión del Consejo quieren aprobar una serie de metodologías para poder salir a controlar con más fuerza lo que sucede en los canales.
$5.000 el camión de agua ajena
DIARIO HUARPE hizo un relevamiento con quienes ofrecen el llenado de pileta con camiones cisterna, un trabajo que no tiene un marco legal claro, aunque está claro que no pueden usar el agua de los canales.
“Yo entrego en Pocito nomás, pero arrímese a cualquier camión municipal y ellos por ahí hacen la changa después de horario”. Esa fue la respuesta de uno de los siete usuarios que ofrecían llenar piletas a través del Marketplace de Facebook. En la mayoría el precio es similar: entre $5.000 y $7.000 el viaje de 10.000 litros para llenar una pileta.
La mayoría trabajan en radios acotados. Unos en zona Rivadavia exclusivamente, otros en Santa Lucía también exclusivamente y otros en Pocito o inmediaciones. De los cinco que contestaron a las llamadas de este medio, tres explicaron que cumplir “cuando haya agua”.
Al ser consultados por el origen de la misma decían que era de buena calidad, de surgente o de pozo, aunque esto es incomprobable y las autorizaciones de extracción de agua subterránea para piletas también se deben tramitar por Hidráulica. El precio es también notorio, porque para tener una bomba funcionando deberían pagar el costo de energía.
Los camiones “municipales” son la mayoría contratados por los departamentos en horarios y días específicos. Desde Chimbas explicaron que no tienen una flota propia, pero sí contratan habitualmente. “Está bien que controlen, nosotros les pedimos que se identifiquen con el logo y hacemos la mayor parte del riego de noche”, aseguró Fabián Acosta, titular de Hacienda chimbero.
En Santa Lucía la situación es similar. Utilizan agua de los canales con autorización para regar espacios verdes donde la red de riego no llegan. Según explicaron, lo hacen solo unos días a la semana y con camiones que contratan de forma tercerizada.
Una práctica histórica que es difícil de controlar
Los municipios son usuarios habilitados para extraer agua, ya que utilizan los camiones cisterna para regar plazas o calles de tierra para facilitar la circulación. También a industrias u obras en construcción, que por cierto tiempo pueden extraer de los canales una cierta cantidad de agua y en determinados días.
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Pero si bien esto está reglamentado, el control y las sanciones a quienes no cumplían se vieron prácticamente imposibles. “Es el inspector de canal el que puede acercarse y pedirle la autorización a quien está extrayendo, pero después, cuando tenía que hacer el procedimiento administrativo, pocas veces se llegaba a una sanción”, explicó Guadalupe López, directora de Hidráulica a DIARIO HUARPE.
En el nuevo procedimiento quieren asignar días, turnos y asociar la patente del camión con el usuario habilitado. Si encuentran a alguien extrayendo más de lo debido podrían iniciar el trámite administrativo y sancionarlo.
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Para estos casos y para los que no tienen ningún permiso, también existe otra herramienta desde lo penal. Es que en 2022 el robo de agua pasó a ser parte de los delitos que Flagrancia juzga, pero según López, los trabajadores aseguran que ir a la comisaría es engorroso. “Para que les reciban la denuncia a veces se pasan una mañana completa y tienen mucho por hacer”, contó.
Con el nuevo procedimiento sería más fácil comprobar la irregularidad y activar las herramientas legales y administrativas. Para esto deberán conseguir los votos del Consejo de Hidráulica, integrado por regantes y autoridades de obras.
“Pero nada de esto va a ser suficiente si no hay una intervención de todos. Del productor que recibe menos agua porque están sacando con camiones y de toda la sociedad, porque lo que hacen es robar el agua de todos”, cerró la funcionaria.