Una de cal y otra de arena: la lluvia demora el pronóstico hídrico y lleva alivio a los diques

San Juan se vio sorprendida por dos jornadas de lluvias intensas, sobre todo este miércoles 28 de septiembre. El frente húmedo causó varios problemas en los departamentos del Gran San Juan y alrededores, pero también en cordillera, lo que provocó un cambio de planes en un proceso clave para el futuro local: las mediciones de las nevadas para establecer el pronóstico hídrico 2022-2023. Por otro lado, también sirvió para aliviar en parte la necesidad de riego local.

Ramiro Cascón, Secretario del Agua, confirmó a DIARIO HUARPE que el vuelo que estaba programado para este miércoles a las zonas altas de la cuenca tuvo que suspenderse. El tiempo hacía imposible subir a los puntos de muestreo, donde los técnicos debían recolectar datos para saber la altura y compactación de la nieve que cayó en invierno.

El viaje deberá esperar a que mejoren las condiciones y había posibilidades de que salieran este jueves. Pero todo dependerá de que el helicóptero pueda ir y volver con seguridad y las zonas sean de fácil acceso.

La primera medición mostró una altura de nieve mejor que la de la temporada pasada, que fue la más seca de los últimos 100 años. Pero no será hasta que lleguen a todos los puntos y puedan medir también la compactación de las reservas que podrán calcular las reservas para la próxima temporada, que inicia el 1 de octubre.

Según explicó Cascón, la primera buena noticia que sacaron del viaje anterior es que los puntos de medición se encuentran bien calibrados, esto quiere decir que tendrán todos los datos necesarios de ese lugar. Esto es importante porque la medición tiene más precisión y esto permite hacer un uso más adecuado del agua.

Una vez que tengan los datos recolectados, los técnicos calcularán cuánto podría llegar a los ríos en los próximos 12 meses. El de la temporada 2021-2022 fue el pronóstico más bajo del siglo, con 450hm3 esperados. Este valor mejoró levemente gracias a las lluvias del pasado verano y creen que podría terminar por encima de los 500hm3. Pero estos valores siguen siendo muy bajos, ya que en promedio la provincia utiliza 1.000hm3 por temporada, la mayoría de ellos para el riego agrícola.

Un alivio para los embalses, que están en nivel crítico

Si bien las lluvias demoraron al menos un día el viaje del helicóptero, permitieron un día menos de desembalse de agua. Es que una vez iniciada la mañana, cuando quedó confirmado que las lluvias iban a ser intensas, desde Hidráulica cortaron el riego por los canales que estaba programado.

Esto significa que durante una jornada podrán no sacar los 36.000 metros cúbicos por segundo (m3/s) que requiere el sector agrícola para regar. Este consumo tiene a los diques en su nivel más bajo desde que existen los tres sobre el río San Juan, con un 18% de su capacidad a principios de agosto, nivel que bajó en las últimas semanas, ya que siguen extrayendo mientras que solo ingresan alrededor de 17.000 m3/s en promedio.