Neuroma de Morton, la enfermedad que puede causar el taco alto: qué es

El pie humano es una estructura compleja que consta de 26 huesos, numerosas articulaciones, tendones y ligamentos, diseñada para soportar el peso del cuerpo y permitir el movimiento. Sin embargo, esta maravilla biomecánica es vulnerable a diversas tensiones, especialmente cuando se usa calzado inadecuado. En particular, el uso de zapatos de tacón alto ha sido vinculado a una serie de afecciones que afectan la salud del pie, como el neuroma de Morton, una condición dolorosa que puede alterar la calidad de vida de quienes la padecen.

El neuroma de Morton es un engrosamiento benigno de los tejidos que rodean los nervios entre los huesos largos del pie, particularmente entre el tercer y cuarto dedo. Esta afección no es visible desde el exterior, pero se produce debido a la irritación o presión constante sobre el nervio, que puede ser causada por el uso de calzado ajustado, tacones altos o lesiones repetitivas. Se caracteriza por una sensación dolorosa en la parte delantera del pie, a menudo acompañada de hormigueo, entumecimiento o la sensación de tener una "piedrita" o un "pliegue en la media". Los síntomas pueden ser especialmente molestos al caminar o estar de pie durante largos períodos de tiempo.

Aunque no siempre presenta signos visibles, los síntomas más comunes del neuroma de Morton incluyen dolor en la bola del pie, que puede irradiar hacia los dedos, y la sensación de tener una piedrita o arruga en el zapato. El dolor generalmente se alivia al quitarse los zapatos o al masajear el pie, pero si la molestia persiste, es importante buscar atención médica para evitar que la afección empeore y cause complicaciones adicionales.

Uno de los factores más comunes en el desarrollo del neuroma de Morton es el uso de calzado inadecuado, particularmente los tacones altos, que desplazan el peso del cuerpo hacia la parte delantera del pie. Esto aumenta la presión sobre los nervios y tejidos blandos, favoreciendo la irritación crónica. Un ejemplo de persona pública afectada por esta condición es la reina Letizia de España, quien debido al uso frecuente de tacones altos ha padecido de esta dolencia.

El tratamiento del neuroma de Morton varía dependiendo de la gravedad de la afección. En algunos casos, cambiar el tipo de calzado puede ser suficiente. Es recomendable usar zapatos con punteras amplias y sin tacones, lo que reduce la presión sobre el nervio. También se pueden utilizar plantillas ortopédicas y, en algunos casos, las inyecciones de corticosteroides pueden ayudar a reducir la inflamación y aliviar el dolor. Otra opción es la fisioterapia, que incluye ejercicios específicos para fortalecer los músculos del pie y mejorar su flexibilidad. En casos más graves, cuando los tratamientos conservadores no son efectivos, se puede recurrir a una cirugía para extirpar el tejido engrosado o liberar el nervio afectado.

El tipo de calzado adecuado es crucial tanto para prevenir como para tratar el neuroma de Morton. Los expertos recomiendan elegir zapatos con punteras amplias para permitir que los dedos del pie se acomoden de forma natural. También se aconseja usar calzado plano y flexible, ya que los tacones altos y los zapatos rígidos incrementan la presión sobre el pie y pueden agravar la afección. Además, caminar descalzo sobre superficies seguras, como césped o arena, puede ayudar a fortalecer los músculos del pie y mejorar su movilidad natural.

Cuidar de nuestros pies es más que una cuestión de comodidad: es un paso fundamental para mantener una postura saludable y prevenir afecciones que pueden afectar significativamente nuestra calidad de vida. Usar calzado adecuado, especialmente evitando los tacones altos y los zapatos ajustados, es una de las medidas más eficaces para prevenir el neuroma de Morton y otras dolencias relacionadas. Si ya experimentas síntomas, es crucial actuar a tiempo y consultar a un especialista para recibir el tratamiento adecuado.