Huarpe Deportivo > Cambiar la realidad
Entrenan jóvenes para contenerlos y alejarlos de las adicciones
Esta actividad la desarrollan todos los sábados en el Barrio Parque Industrial. Asisten tantos mujeres como varones. Tienen el sueño de tener un playón deportivo.
Por Facundo Merenda
Volver al potrero con el objetivo de sacar talentos no tan solo para el juego sino para la vida misma. Esto es lo que intenta hacer Iris con un grupo de profesores todos los sábados el en el Barrio Parque Industrial. Allí más de cuarenta jóvenes, entre mujeres y varones, se congregan con el fin aprender un deporte y estrechar lazos con sus pares.
“Veía muchos chicos en la calle, en pasos malos o en la droga y con mis hijas decidimos hacer algo para cambiar esta realidad”, dijo a DIARIO HUARPE, Iris Tapia.
Ella es la presidente de la Unión Vecinal de esa localidad, al mismo tiempo trabaja en la Escuela Enrique Pestalozzi que se ubica en aquella zona. Conoce cada rincón de ese lugar y los habitantes que la componente. Iris materializa este sueño junto a sus dos hijas Araceli y Katherina Rodríguez, junto a ellas está el profesor Diego Ruarte.
El proyecto comenzó hace cuatro años y con el correr del tiempo se fue perfeccionando el dictado y consolidando el espacio físico para su desarrollo. Cuando inició solo se inscribieron dos niños y luego el cupo se fue incrementando. Actualmente se entrenan en un playón ubicado al lado de la Capilla de San Cayetano.
“Durante la semana es muy difícil juntar a todo el grupo ya que tratamos de que se dediquen a la realización de los deberes escolares. Además, ahora que oscurece más temprano el playón no tienen luz y eso dificulta las actividades”, argumentó Iris. El sueño que tienen en el pueblo es construir un gran polideportivo. “Los padres acompañan en gran medida esta iniciativa y quieren que concretemos este anhelo”.
Por su tarea diaria en contacto con los niños, Iris en cada partido o entrenamiento, habla con ellos y trata de aconsejarlos sobre algunos valores de la vida como educación, cuidado personal, progreso y amistad, “ellos tienen que sentirse contenidos, más allá de sus padres, también de la sociedad que somos otra de las patas fundamentales para mejorar y acompañar a los niños en este proceso de desarrollo”, dijo.
Más allá de esta tarea, ahora van a presentar una nota a las autoridades municipales para ver si es posible que le brinden la copa de leche. Cuando puede, ella con sus hijas llevan algo para compartir entre los chicos que ansiosos y felices esperan el paso de la semana para lucirse cada sábado detrás del balón.