El Cronista
Mercosur-UE: el Gobierno abre a Europa la obra pública y las concesiones de servicios
El acuerdo con el viejo continente prevé el ingreso de firmas extranjeras al mercado de compras gubernamentales. La Casa Rosada dice que sólo regirá a nivel federal, aunque Bruselas insiste con entrar a toda escala.
POR EL CRONISTA PARA DIARIO HUARPE
El acuerdo de asociación estratégica entre el Mercosur y la Unión Europea (UE), anunciado el viernes, permitirá a las empresas del viejo continente cumplir una de sus más ambiciosas metas, que es entrar a un mercado que mueve millones y permanece hasta ahora "cautivo" de las compañías nacionales. Este es el mercado de las compras públicas.
Un documento emitido desde Bruselas, la capital política de la UE, resalta la apertura de las contrataciones del Estado y subraya que "el acuerdo es muy satisfactorio en tanto otorga acceso a un mercado que el Mercosur aún no ha abierto a ningún otro socio comercial y que sólo recientemente ha liberalizado internamente".
El capítulo comercial que se concluyó en la tarde del viernes permitirá a las firmas europeas competir y ganar contratos gubernamentales, sin caer presos de la discriminación por ser empresas foráneas.
El mismo documento subraya que el proceso de licitación será "más justo y transparente" dado el compromiso de los países del cono sur, entre ellos la Argentina, de publicar en sitios únicos toda la información y abrir canales de consulta.
Si bien la Cancillería difundió otro documento el mismo día en que se anunció la conclusión de las negociaciones resaltando que las compras gubernamentales quedan "preservadas como política de desarrollo" y que la liberalización "solo aplica a nivel federal", en Bruselas, por el contrario, resaltaron oficialmente que "es posible con el tiempo que las firmas europeas accedan a contratos con entidades subnacionales".
La Argentina y Brasil, que tienen un sistema político federal, sólo aseguraron acceso a contratos con ministerios de la administración pública federal, agencias gubernamentales y universidades nacionales. Aunque hubo un compromiso de "trabajar con entidades subnacionales, a nivel provincial o municipal, para permitir a las firmas europeas competir por contratos en esos niveles". El objetivo europeo es concluir este proceso a más tardar dos años después de la entrada en vigor del acuerdo.
El tratado en ciernes, avalado por los ministerios de Relaciones Exteriores, Hacienda y Producción y Trabajo, permite a los europeos proveer bienes, servicios y trabajos pagos por entidades públicas a nivel federal. En particular, la Argentina y Brasil comprometieron también concesiones de servicios, por ejemplo, para construir autopistas donde el constructor sea remunerado a través de los peajes. Con los detalles que hoy se conocen, nada impide a las firmas extranjeras pulsear por servicios públicos de eventuales privatizaciones.
El acuerdo también incluye cláusulas sobre la actividad de las empresas estatales. Según el texto, las grandes firmas cuyo paquete accionario esté mayoritariamente dominado por el Estado deberán operar "libres de toda consideración y preferencia que no estén motivadas por conductas empresariales", evitando cualquier posible distorsión de las condiciones de competencia.
Ya en diciembre de 2017, la Casa Rosada avaló al interior de la unión aduanera que comparte con Brasil, Paraguay y el Uruguay un esquema de apertura a las contrataciones estatales dentro del Mercosur.
Para los socios sudamericanos, la oferta argentina incluyó todos los bienes comerciables, con excepción de compras de medicamentos e instrumentos que compra el Ministerio de Salud; prendas, complementos, calzado, cascos y equipamiento militar de Defensa, y lanchas para el Ministerio de Seguridad. En las compras de Transporte, Energía y Minería, e Interior, Obras Públicas y Vivienda, se excluye la compra de maquinarias.