Muerte en 9 de Julio: la acusada pidió respeto y dijo que es inocente

Poco antes de las 14 de este viernes 19 de enero, Luciana Bustos (33), la docente de historia que es la única sospechosa en la causa que investiga la muerte del profesor de Educación Física, Marcelo Amarfil (46), habló ante la jueza Celia Maldonado en la audiencia de formalización de la causa. La mujer pasó por momentos de llanto, luego se calmó, pidió respeto para su familia y dijo que es inocente. 

Bustos se encuentra detenida desde la madrugada del miércoles cuando Amarfil, murió desangrado tras una herida profunda cortante en la aorta, en el interior de un auto Ford Fiesta en 9 de Julio. El caso estuvo rodeado de datos escabrosos porque en el auto encontraron elementos relacionados con sadomasoquismo. Había un elemento para vendar los ojos, muñequeras, un blíster de una pastilla de viagra y un cuchillo que era parte de un set de asado y se cree que fue el arma homicida.  

Tras la descripción de los hechos y la presentación de las pruebas, la jueza le preguntó a Bustos si quería declarar, la joven dijo que iba a hacer una declaración "breve". Con calma, la docente comenzó saludando con cordialidad a todos los presentes en la sala. 

Luego dijo: "gracias a mis familiares por estar presentes", gracias también a Cecilia que me acompaña", aseguró la mujer quien se refirió especialmente a su abogada, Cecilia Mut. Luego se tomó unos segundos para referirse a los medios de comunicación que estaban cubriendo la audiencia. 

"Quería decirle sobre todo a los medios que sean muy cautelosos con la información que publican sobre todo por el respeto a las personas que están afuera, por mis familiares, mis viejos que son personas grandes, mi novia, mis sobrinos y todas las personas que me conocen", aseguró la docente que trabaja en la UNSJ y es becaria del Conicet.  

"Quería decirle sobre todo a los medios que sean muy cautelosos con la información que publican sobre todo por el respeto a las personas que están afuera, por mis familiares, mis viejos que son personas grandes, mi novia, mis sobrinos y todas las personas que me conocen", aseguró la docente que trabaja en la UNSJ y es becaria del Conicet.  

Luego la acusada volvió a insistir en su inocencia. "Creo en la Justicia, creo que la verdad va a salir a la luz", aseveró Bustos quien agregó que desde "el primer momento" ha colaborado para que todo se esclarezca.  "Sostengo mi inocencia", aseguró la chica y antes de terminar agradeció de nuevo a sus familiares que están "siempre". 

Tras escuchar a la acusada la jueza Álvarez dio un plazo de un año para la Investigación Penal Preparatoria (IPP) y dictó la prisión preventiva por el mismo plazo en el Servicio Penitenciario Provincial.

El llanto

Antes de declarar Bustos tuvo un momento de crisis y llanto. Es que durante la presentación de las pruebas, la mujer vio en un televisor de 32 pulgadas las fotos del lugar en el que murió Amarfil. El auto ensangrentado y el cuerpo de su amigo tendido en el suelo.

Al parecer la gran cantidad de sangre que se veía en las fotos y el relato pormenorizado de lo que pasó fue demasiado y la mujer no pudo soportarlo y se largó a llorar. Se tapaba la boca, las manos le temblaban y por momentos prefirió agacharse para no tener que revivir lo sucedido.