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Envenenaron mascotas para robar y los vecinos temen por sus hijos

La preocupación de los vecinos de un barrio semiprivado de Pocito es porque además de sufrir la pérdida de sus mascotas, temen que los niños puedan envenenarse.

03 de octubre de 2023
La preocupación es porque los niños juegan con los animales. Foto: Gentileza.

Vecinos de un loteo semiprivado de Pocito, visibilizaron una problemática que están viviendo en su barrio. Es que en el loteo Moreno, cerca de diez mascotas entre perros y gatos han sido envenenados. Según el denunciante, Mauricio Quilodran, el envenenamiento habría sido ocasionado por delincuentes con intenciones de entrar a robar a las viviendas. En consecuencia, un vecino del loteo que perdió a su mascota por el envenenamiento fue víctima de robo en la mañana de este 3 de octubre.

El loteo Moreno está ubicado en calle 10 entre Vidart y Chacabuco, Pocito. Foto: Gentileza

“Un cuasi-humano estaba envenenando y matando a los perros de la zona. Identificamos al responsable, pero en ese momento no teníamos pruebas para hacer algo más. Por las dudas decidimos no recibir más perros por el riesgo para ellos”, expresó Mauricio en su cuenta de Twitter.

Sin embargo, a pesar de tener el problema de la inseguridad y la muerte o desaparición de muchas mascotas, los vecinos se preocupan por la integridad de sus hijos, ya que en el loteo hay muchos niños que juegan en el parquizado.

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Quilodran, vecino del loteo, realizó las denuncias correspondientes ante la Comisaría 7° de Pocito y también a la Secretaría de Ambiente por el tema del envenenamiento de los animales.

La mayoría de las mascotas de los vecinos fueron desapareciendo con el correr de los meses. Foto: Gentileza

“Antes el barrio era sumamente tranquilo y primero pensamos que envenenaban a los perros por una cuestión de maldad o de hacer un daño, pero cuando hice la denuncia me dijeron que era para robar”, explicó Mauricio a DIARIO HUARPE.

Todavía no hay certezas sobre el veneno que se ha utilizado, pero los vecinos temen que sean venenos que continúan contaminando el ambiente del barrio.

“Es peligroso porque el veneno no deja rastros y los niños juegan al aire libre”, concluyó el vecino.

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