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Tarifazo aéreo en vacaciones de invierno: los pasajes de las low-cost subirán al menos 50%

El Gobierno hizo nuevas reuniones con las empresas aéreas por el nuevo marco regulatorio de cabotaje. Las bandas tarifarias mínimas empezarán a regir a fines de junio, días antes de las vacaciones de invierno.

POR EL CRONISTA PARA DIARIO HUARPE

El restablecimiento de las bandas tarifarias mínimas en los vuelos domésticos provocaría un aumento del 50% en los precios de los pasajes aéreos antes de las vacaciones de invierno, especialmente por parte de las low-cost como Flybondi y JetSmart, que ofrecen valores a mitad del precio promedio del mercado en algunas de sus rutas.

Según estableció la propia norma, el 24 de junio es la fecha límite para que entre en vigencia el decreto que se publicó en el Boletín Oficial el 24 de diciembre, en el que Alberto Fernández instruyó al Ministerio de Transporte de la Nación a definir un nuevo esquema de precios máximos y mínimos en un plazo de 180 días.

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De esta manera, se espera que las tarifas de los vuelos de cabotaje se ajusten en la previa del receso invernal, que este año tendrá lugar entre el 18 y el 29 de julio. El mayor impacto se verá en los precios de los pasajes de las low-cost, que, obligadas por la disposición, deberán adecuar los valores al piso y al techo que se establezcan.

Aunque continúan las negociaciones entre representantes de las empresas y autoridades del Gobierno nacional, en el sector ya dan por descontada la reimplementación de la medida, que implica un cambio de reglas para la industria de cabotaje y que se eliminó durante la presidencia de Mauricio Macri para favorecer la llegada de las aerolíneas de bajo costo.

El próximo paso será la determinación de los valores mínimos y máximos que las aéreas podrán cobrar. Así se definió tras la serie de encuentros que tuvieron lugar entre los directivos de las tres aéreas -Pablo Ceriani por Aerolíneas, Mauricio Sana por Flybondi y Gonzalo Pérez Corral por JetSmart-, que se juntaron por separado con el jefe de Gabinete del Ministerio de Transporte, Álvaro Errea, y la titular de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), Paola Tamburelli.

Pese a que todavía no se definieron, en la industria hablan de un incremento del 50% teniendo en cuenta la diferencia de precios que existen entre las opciones de traslados que ofrecen las low-cost y las alternativas que brinda Aerolíneas Argentinas, que también deberá adaptar sus tarifas, aunque el impacto le será menor.

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CÓMO SE DETERMINARÁ LA SUBA DE PRECIOS

Para la definición de las bandas tarifarias, cada aerolínea deberá presentarle al Gobierno, por solicitud de una comisión de análisis técnico de la ANAC, un detalle de sus costos directos e indirectos correspondientes a los años 2019, 2020 y 2022, según pudo saber El Cronista.

De esta manera, se busca definir la tarifa media de acuerdo a lo que indica la normativa, en función de una fórmula que incluye, entre otros elementos, un cálculo con base en los costos y las ganancias de las empresas.

"Como los costos van cambiando, esa tarifa económicamente retributiva se modifica también y tiene que actualizarse. Si no, queda rezagada, especialmente en un contexto de inflación como el actual", señalaron a este medio fuentes allegadas a las reuniones.

POSICIONES OPUESTAS

En los encuentros que mantuvieron, las compañías reforzaron sus posturas. Aerolíneas volvió a defender el régimen de bandas tarifarias porque, de acuerdo a su visión, significa "una mayor previsibilidad". Para la operadora de bandera, aporta razonabilidad y sustentabilidad a un sistema que viene de una liberalización extrema.

En diciembre, el presidente de Aerolíneas, Ceriani, consideró que la reinstalación de las bandas tarifarias resulta beneficiosa para todo el sector, ya que "preserva las finanzas de las compañías".

Las low-cost defendieron sus argumentos en contra y remarcaron que limita la posibilidad de ofrecer vuelos a precios accesibles. Reiteraron que atenta contra la libre competencia, favorece a compañías estatales (Aerolíneas e Intercargo, prestadora de servicios de rampa) y, además, que la imposición de bandas tarifarias aumenta artificialmente los precios de los pasajes, hasta igualarlos entre los distintos operadores, en perjuicio de los usuarios.

Le acercaron nuevos datos al Gobierno. Aseguraron que, durante el período con regulación de bandas tarifarias (entre 2002 y2014), la cantidad de rutas de cabotaje disminuyó un 10% y aquellas que no pasan por Buenos Aires se achicaron en un 40%. "Con la desregulación del sistema, la Argentina volvió a contar con mayor oferta en el mapa aerocomercial", concluyeron.

Por: Agustina Devincenzi para El Cronista.

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