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Bomberos voluntarios: cumplir con el deber en medio de una semifinal mundial
Mientras las calles sanjuaninas quedaron paralizadas por el partido de Argentina-Croacia, ellos asistieron a su lugar de trabajo para seguir al servicio de la comunidad frente a una emergencia.
Por Nadia Correa
Son muchos los trabajadores a los que una semifinal mundial no les modifica la rutina y continúan con la actividad que juraron solemnemente cumplir para estar al servicio de los demás. Personal médico, policías y bomberos son algunos de los que en medio de uno de los partidos más importantes para Argentina estuvieron firmes en sus puestos. Este medio llegó hasta el Cuartel de Bomberos Voluntarios de Capital para conocer cómo se vivió el pase a la final.
En la oficina principal, un par de sillas, el teléfono que suena en caso de emergencias y un viejo televisor 29 pulgadas, nada lujoso, pero suficiente para seguir de cerca la ilusión de más de 45 millones de argentinos. Así era el escenario dentro del cuartel donde estaba Rafael Galván, bombero voluntario de Capital, siguiendo el minuto a minuto de Argentina-Croacia. “Seguimos cumpliendo nuestras guardias normalmente, eso no cambia por más partidos que haya. Nosotros tenemos que cumplir con nuestro deber”, contó a DIARIO HUARPE el hombre de 37 años.
Según detalló Galván, las guardias están conformadas por cuatro a cinco personas. “Junto a mi compañero estamos acá en el cuartel, pero el resto de los voluntarios están ya sea en sus casas o en sus trabajos, pero como decimos nosotros, prestos para el servicio. Es decir, que si algo sucede, de manera inmediata tienen que hacerse presentes”, afirmó.
“Si recibimos una llamada, en un minuto nosotros tenemos que estar listos para salir hasta donde se nos necesite”, dijo.
El bombero voluntario explicó entre risas que este fue el primer partido que le toca ver desde el cuartel. “Por supuesto que estoy muy ansioso por el resultado, pero le tengo fe al equipo. Este es el primero que me toca verlo desde acá, pero siempre entendiendo que estamos al servicio de la gente y que eso es lo más importante”, consideró.
Afortunadamente, durante los 90 minutos que duró el encuentro, el teléfono de emergencias no sonó, pero durante el mundial, esta tranquilidad no siempre se sostuvo. “Fue durante el partido de Argentina-Países Bajos que nos llamaron por un incendio de pastizales en la Avenida Circunvalación durante el último gol en penales y en ese mismo momento se apagó el televisor, nos cambiamos y salimos. Ni siquiera la radio íbamos escuchando, después nos enteramos cómo salimos”, concluyó.