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La Boleta Única de Papel debutó en San Juan y todo indica que llegó para quedarse
Los sanjuaninos coincidieron en destacar la rapidez, simplicidad y transparencia de la Boleta Única de Papel. Autoridades de mesa y votantes aseguraron que la experiencia marcó un antes y un después en la forma de votar.
El debut de la Boleta Única de Papel (BUP) en las elecciones legislativas de 2025 dejó una impresión ampliamente positiva entre los sanjuaninos. La jornada se desarrolló con fluidez y el nuevo sistema fue valorado tanto por los votantes como por las autoridades de mesa, que coincidieron en destacar su rapidez, sencillez y transparencia.
“Fue rápido”, expresó Emilia, vecina de Capital, al salir del establecimiento donde votó. Esa palabra —rápido— se repitió con frecuencia entre los consultados. Muchos destacaron la reducción del tiempo dentro del cuarto oscuro, que en la mayoría de los casos no superó el minuto. “Más rápido, más lindo, mejor”, comentó otra mujer, quien decidió concurrir temprano “para evitar tanta gente”.
Otros votantes subrayaron la mejora en la claridad del proceso y su impacto en la transparencia. “La nueva forma de votar me parece excelente. Es mucho más fácil y más difícil de hacer trampas”, señaló Marina, quien además celebró el ejercicio cívico: “Mientras el cuerpo y la mente me den, voy a seguir votando”. Un joven que asistió acompañado por su madre coincidió en la valoración general: “Me gustó cómo se votó. Es más cómodo y entendible”. Otro vecino completó la idea: “Ya no hay tanto papelerío que seleccionar. Todo está más ordenado”.
¿Qué es la BUP y cómo fue su implementación?
La Boleta Única de Papel es una innovación en el sistema electoral argentino que reúne en una sola hoja a todos los partidos, candidatos y categorías de cargos que se eligen en un mismo acto electoral. A diferencia del sistema tradicional —en el que cada agrupación tenía sus propias boletas—, la BUP simplifica el procedimiento y reduce los riesgos de fraude, pérdida o manipulación de papeletas.
Su diseño está organizado en filas horizontales que corresponden a las distintas categorías de cargos (por ejemplo, diputados o senadores nacionales) y columnas verticales que representan a las agrupaciones políticas. Al lado de cada nombre de candidato o lista, el elector encuentra un casillero en blanco que debe marcar con un bolígrafo para expresar su voto.
El procedimiento también es simple. El día de la elección, el ciudadano se presenta con su DNI en la mesa correspondiente. El presidente de mesa le entrega la boleta única y un bolígrafo, y lo habilita para ingresar a la cabina de sufragio. Una vez dentro, el votante marca sus opciones de preferencia, dobla la boleta según las indicaciones impresas y la deposita en la urna.
Una experiencia positiva también para las autoridades de mesa
El buen funcionamiento del sistema no solo fue reconocido por los electores. Los presidentes de mesa también destacaron la agilidad y organización del proceso, especialmente al momento del escrutinio.
Gonzalo Noguera, presidente de la mesa 979, describió la dinámica como “muy sencilla para todos”. Según explicó, “fue muy dinámico, incluso para los votantes, porque ya venían con la idea clara de cómo votar”. El recuento, agregó, se completó en apenas cuarenta minutos.
Por su parte, Laura Fernández, presidenta de la mesa 965, afirmó que el cierre fue notablemente rápido: “A las 18.40 terminamos de contar los votos y a las 19 ya habíamos completado las actas y cerrado las urnas”. Explicó que la ausencia de sobres agilizó el escrutinio: “Antes había que abrir y separar cada sobre, eso llevaba tiempo. Ahora todo es más directo”. También destacó una herramienta práctica: “Nos dieron un sello para marcar cada boleta contabilizada. Eso facilitó muchísimo el control”.
En la misma línea, Emiliano Torrejón, presidente de la mesa 982, aseguró que “el escrutinio fue rápido y el sistema mucho más efectivo”. Señaló además que “el hecho de que sea una sola boleta simplifica el conteo y la relación con los fiscales”.
Un cambio que llegó para quedarse
Tanto votantes como autoridades coincidieron en que el nuevo sistema representa un avance en la modernización electoral y en la confianza ciudadana. “Sí, 100%. Totalmente. No volver al otro sistema”, concluyó Laura Fernández, reflejando el consenso general.
Con su debut en San Juan, la Boleta Única de Papel no solo transformó la logística del acto electoral, sino también la manera en que los ciudadanos perciben su voto. La experiencia dejó una certeza compartida: votar puede ser más simple, más rápido y más transparente.