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Refuerzan operativos para evitar que la gente se bañe en los canales de San Juan
Con la llegada del calor, Bomberos y Policía refuerzan controles en los canales de riego de San Juan y recuerdan que bañarse está prohibido por ley y puede derivar en sanciones.
POR REDACCIÓN
Con los primeros días de verano en San Juan, una escena se repite en distintos puntos de la provincia: personas y familias que se refrescan en canales de riego para aliviar las altas temperaturas. Aunque para muchos parece una alternativa rápida y accesible, se trata de una práctica prohibida por la ley, peligrosa para la integridad física y riesgosa para el funcionamiento del sistema hídrico que abastece a la producción agrícola.
Ante este escenario, DIARIO HUARPE dialogó con Daniel Domínguez, jefe del Destacamento N° 1 de Bomberos de Rawson y especialista en rescate acuático, quien explicó que durante el verano se intensifican los operativos de prevención y control en canales, afluentes y zonas no habilitadas para el baño.
“No se trata solo de bañarse en el agua. Estas acciones pueden provocar obstrucciones en los canales de riego y generar inundaciones en sectores donde el agua debe circular correctamente para los cultivos”, explicó Domínguez, al remarcar que el problema no es solo individual, sino que afecta a toda la comunidad productiva.
Controles, advertencias y sanciones
Domínguez indicó que, al detectar personas bañándose en canales, Bomberos actúa junto a la Policía de San Juan para garantizar el cumplimiento de la normativa vigente. “Del 100% de las entrevistas que realizamos, muchas no son bien recibidas, pero forman parte de la prevención que llevamos adelante en canales y afluentes”, señaló.
Además, confirmó que los procedimientos también se activan a partir de denuncias realizadas al 911, una herramienta clave para intervenir de manera rápida y evitar situaciones de riesgo. “Bomberos actúa ante denuncias de personas que se están bañando en canales”, precisó.
Domínguez recordó que esta conducta está prohibida por el Código de Faltas de San Juan. “Nosotros actuamos como auxiliares de la Justicia. Si se detecta la falta, se detiene a la persona, se la entrevista y se da intervención al juez para que determine la sanción correspondiente, sin perjuicio de que exista o no una causa penal”, detalló.
Desde Bomberos insisten en que los canales no están diseñados para el esparcimiento. La fuerza del agua, los desniveles, las compuertas, los residuos y la falta de visibilidad convierten estos espacios en verdaderas trampas, especialmente para niños y adolescentes.
“Muchas veces el agua parece tranquila, pero el peligro está debajo. Hay corrientes, estructuras y cambios bruscos de profundidad que pueden provocar accidentes graves o fatales”, advirtió el jefe del destacamento.
Capacitación permanente para rescates acuáticos
En paralelo a los controles, Domínguez confirmó que el personal de Bomberos continúa en formación constante para intervenir ante emergencias en distintos escenarios acuáticos. “Hace un mes, la Dirección de Bomberos inició el curso Fisac, de Rescate y Salvamento Acuático, destinado a capacitar al nuevo personal en ríos, canales, piletas y diques”, indicó.
La especialización busca garantizar respuestas rápidas y eficaces ante situaciones de riesgo, en un contexto donde el verano incrementa exponencialmente las intervenciones.
Por último, Domínguez recordó que la provincia cuenta con lugares públicos habilitados para el disfrute del agua de manera segura. “En el Río San Juan y en Ullum, el Gobierno provincial dispuso iluminación, baños químicos, guardavidas, patrullaje policial y presencia de bomberos”, explicó.
En estos sectores, el personal delimita perímetros seguros para el baño y mantiene equipos preparados para actuar ante cualquier eventualidad. “La idea es que la gente disfrute del verano, pero en espacios cuidados y sin exponerse a riesgos innecesarios”, concluyó.
Con las altas temperaturas instaladas, el mensaje de las autoridades es claro: refrescarse en los canales no solo está prohibido, sino que puede costar caro. La prevención y el respeto por las normas siguen siendo la mejor herramienta para evitar tragedias evitables.