Producción de San Juan: además de pistachos, la provincia exporta industria, agro y servicios

Entre el martes y el miércoles surgió una polémica inesperada: heladeros de Buenos Aires reclamaban importar pistacho, a pesar de que hoy San Juan produce y según los empresarios locales lo suficiente para abastecer el mercado interno. Pero esta fruta seca no es el único bien que sale de economía sanjuanina que puede sustituir importaciones. Tanto en la agricultura como la industria, la provincia todavía puede “sorprender” al resto del país.

Si bien a la provincia se la reconoce por su producción vitivinícola y la industria minera, la matriz productiva cambió y en la actualidad, la balanza comercial de dólares es positiva, al contrario de lo que sucede en el país. San Juan exporta alrededor de U$D1.200 millones e importa U$D200 millones.

En diálogo con DIARIO HUARPE, el ministro de producción de San Juan resaltó que se trata de un avance multisectorial. Tanto la agricultura, la industria como los bienes y servicios crecieron. Además, dijo que una de las ventajas que tiene San Juan es que produce riqueza “con valor agregado” y no solo materias primas.

El tomate para industria es uno de los abanderados de este proceso. Mientras que hace 15 años buena parte de este producto se importaba de Chile, Perú y otros países, en la última temporada San Juan produjo casi 300 millones de toneladas. De la provincia sale casi el 40% del tomate argentino.

La superficie productiva aumentó, pero, destacó Lucero, también se rinde por cada hectárea. Esto se debe en parte a los avances en tecnificación de esta industria, que tiene un 95% de riego por goteo y más de un 80% de cosecha tecnificada. Algo muy similar sucedió hace décadas con la olivicultura, hoy uno de los productos premium que Argentina exporta con participación mayoritaria de San Juan.

En el sector textil hay dos empresas clave que se encuentran sustituyendo importaciones: Lacoste y Vicunha. Esta última, además de producir en Argentina las telas denim en lugar de importarla, empezó la construcción de una hilandería para no tener que importar esta materia prima. Lo concretarían en 2024.

Las autopartes son también un producto que San Juan empezó a hacer hace décadas con, por ejemplo, Taranto, eliminando la necesidad de comprarlo en el exterior. La planta de Finning Cat ubicada en Santa Lucía sustituyó los macizos de cables de los camiones fuera de ruta mineros al empezar a construirlos en la provincia y anunció que hará reparaciones que antes realizaban en el exterior.

La producción de energía fotovoltáica empezó hace menos de 10 años y hoy con los 18 parques solares que están produciendo San Juan genera 410 MW de potencia de los casi 670 que necesita. Hay tres proyectos más en avance, dos en construcción, otro en carpeta.

Hay también ejemplos en industrias 4.0, como es el caso de Folcode, una empresa local que se dedica a vender servicios de software y educación a distancia. La compañía empezó como una start up y hoy tiene más de 100 empleados de varias provincias, aunque la mayoría son sanjuaninos.

En simultáneo, aseguró Lucero, están creciendo productos que buscan que San Juan deje de depender de la compra a la pampa húmeda u otras regiones argentinas. Si bien hay molinos produciendo harina y fideos, la mayor parte del trigo se compra todavía del este nacional, pero hay un grupo de productores que empezaron a reinsertar este cultivo de forma local. En la misma línea está el maíz, que de plantarse en la provincia permitiría a los criaderos de animales dejar de depender de la compra a otras provincias.

El cannabis medicinal, aseguran, tiene potencial para convertirse en un gran generador de divisas. Argentina importa en la actualidad la mayor parte de este producto para los usuarios de aceites de grado medicinal, pero con Canme, el objetivo es abastecer el mercado interno y también el externo.

Hay también ensayos de cultivos tradicionales y producción a pequeña escala que tienen potencial. La quínoa, por ejemplo, es un producto que Argentina importa de Bolivia y Perú, pero que en San Juan recuperó algo de terreno con cultivos en escala de ensayo. Esto fue suficiente para que en 2021 produjeran lo suficiente para que se cree la primera leche de quínoa comercial del país.

Si bien cada uno de los sectores tiene desafíos y problemáticas, Lucero remarcó que la diversificación es una de las políticas de estado de la provincia. Se trata de una estrategia para “ser más autosuficientes, porque esto permite tener más estabilidad”.